El nombre de Serapias de origen griego proviene de un Dios Egipcio “Serapis”, en cuyos templos se organizaban orgías, quizá por la atribución de supuestos efectos afrodisíacos a estas orquídeas.
Serapias cordigera presenta el labelo de las flores muy ancho y cordiforme, de color purpureo, lo que la diferencia de otras especies del género que tienen el labelo más estrecho. En la parte interior del labelo presenta dos callosidades divergentes ( Serapias lingua sólo presenta una).